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El Booster VIT-C/FE anti-stress es una potente combinación de activos que ayuda a prevenir daños causados por los rayos UV, la polución ambiental y el stress. Es también ideal para disminuir manchas, unificar el tono de la piel, sumar luminosidad y combatir el aspecto cansado.
Tiene una textura líquida para una rápida absorción.
Está compuesto por dos ingredientes principales: Ácido L-Ascórbico (forma activa de la vitamina C) y Extracto de Tephrosia purpurea. La Vitamina C es un excelente antioxidante y está potenciada en este Booster por el agregado de Tocoferol (Vitamina E) y Ácido Ferúlico. Estos tres ingredientes forman una sinergia preventiva, estable y efectiva1 que ayuda a combatir el daño oxidativo que generan agresores como los rayos UV y la polución en la piel. De hecho, la Academia Americana de Dermatología considera que suplementar los protectores solares con antioxidantes podría ser el futuro de la protección solar2. Por su parte, el Extracto de Tephrosia purpurea se adhiere a la causa de la prevención de daño pero por un mecanismo de acción diferente: protege contra los efectos del stress en la piel. Los estresores la afectan negativamente, causando desde irritación y problemas de cicatrización hasta envejecimiento prematuro y aspecto cansado. Este novedoso ingrediente combate el stress y sus efectos en la piel mediante la disminución de los niveles de cortisol (hormona del stress) y el aumento de los recursos detoxificantes locales.
El Ácido Ascórbico es un potente antioxidante que protege del daño causado por los rayos UV, la polución y otros agresores. Ayuda así a prevenir el fotoenvejecimiento y el cáncer de piel3. Tiene la ventaja, además, de mejorar manchas y unificar el tono de la piel. Suma luminosidad y suele ser el preferido de quienes buscan combatir opacidad.
Cumple sus dos funciones principales (antioxidante y despigmentante) a través de diferentes mecanismos:
Vale aclarar que la absorción de Vitamina C consumida en los alimentos (en morrones, kiwis, naranjas, guayabas) es limitada porque depende de un mecanismo de transporte saturable, por lo que aumentar su consumo en los alimentos después de cierto límite no incrementa la cantidad que llega a la piel3. Es por eso que la aplicación tópica de Vitamina C (cuando está bien formulada) es una excelente opción para aumentar su concentración en la piel y obtener sus beneficios. Es uno de los preventivos estrella en la cosmética y la dermatología desde hace décadas. 😉
Nuestro Ácido Ascórbico al 15% no se encuentra solo en el Booster Vit-C/FE: decidimos potenciarlo con un agregado de Vitamina E al 1% y Ácido Ferúlico al 0,5%. Esto fue a raíz de dos investigaciones que demostraron la superioridad de esta sinergia comparada con el uso de Ácido Ascórbico solo:
En 2003 un grupo de investigadores demostró que una solución estable de Vitamina C al 15% y Vitamina E (Tocoferol) al 1% multiplicaba por 4 la fotoprotección de la piel4. Dos años más tarde, el mismo equipo demostró que el agregado de Ácido Ferúlico al 0,5% a la solución de Vitaminas C y E duplicaba su efecto protector, aumentándolo de 4 a 8 veces1. Ante estos resultados, en The Chemist Look elegimos utilizar esa misma formulación antioxidante para nuestro Booster de Vitamina C: potente y con eficacia mega comprobada. 😉
Nota: ¡Ojo! Los antioxidantes potencian la fotoprotección, pero esto no quiere decir que sustituyan al filtro. Los protectores solares hacen que los rayos UV “reboten” y no atraviesen la piel. ¡Sigue siendo fundamental usarlos! Lo que hacen los antioxidantes es potenciar los recursos de defensa de la piel para protegerse del daño de los rayos UV que sí logran atravesar la barrera. ¡Conocé nuestros FPS!
Este novedoso ingrediente de origen 100% vegetal -Ecocertificado orgánico- actúa combatiendo los efectos que genera el stress en la piel. Lo conocimos el año pasado en una feria de innovación, en la que ganó el primer premio. Y era de esperar, porque implica un cambio de paradigma respecto a lo que se venía haciendo en cosmética. Propone prevenir y tratar el daño mediante el control de la hormona del stress, mientras que lo clásico solía ser mucho más lineal: estimular a los fibroblastos para que secreten colágeno y elastina, aumentar la concentración de antioxidantes o disminuir la melanina (pigmento de la piel). No tenemos nada en contra de estos mecanismos y de hecho los usamos y nos encantan, pero la verdad es que lo que propone este nuevo activo marca el inicio de una nueva etapa en el desarrollo biotecnológico para la piel.
El rostro se encuentra constantemente expuesto a factores que lo amenazan: rayos UV, polución, productos irritantes y agresiones mecánicas. A estos les llamamos estresores externos. Perjudican a la piel de forma no menor. Se demostró, por ejemplo, que la exposición crónica a las partículas y al sonido generado por el tráfico de vehículos aumenta las chances de tener enfermedades en la piel5.
Pero, además, el stress psicológico tampoco pasa inadvertido. Se comprobó que, cuando estamos sometidos a stress, la barrera de la piel se perjudica más y es menos eficaz recuperándose luego de una agresión.
Se testeó a estudiantes de medicina (a un grupo en período de exámenes y a otro de vacaciones), a quienes se les dañó la barrera de la piel usando cinta adhesiva. Se demostró que, a mayores niveles de stress, mayor era el daño y peor la recuperación de la barrera de la piel6. Otros estudios confirmaron el mismo deterioro en dos situaciones bien diferentes:
Además, está comprobado que el stress enlentece el tiempo de cicatrización de heridas. Un estudio evaluó la velocidad a la que cicatrizaban 26 mujeres: 13 estresadas por una situación familiar (un ser querido enfermo a cargo) y 13 no estresadas. El grupo en condiciones de stress tuvo un tiempo de cicatrización notablemente mayor (con una diferencia de 9 días) que el grupo control9.
Se sabe, además, que el stress favorece afecciones inflamatorias como psoriasis, dermatitis atópica, acné y alergias10. Se demostró, por ejemplo, que las personas con psoriasis tienen aumentos mayores de cortisol en respuesta al stress que el resto11. Con respecto a la dermatitis atópica, un estudio mostró en 2013 que su severidad se correlaciona con los niveles de cortisol: a mayor cortisol (stress), más severidad de la dermatitis12. Está demostrado, por último, que el stress causa envejecimiento de la piel. Aumenta líneas, arrugas, manchas y flacidez13.
Antes de entrar en detalles sobre la acción protectora del Extracto de Tephrosia Purpurea, va un resumen sobre qué generan en nosotros los estímulos estresantes. El stress es una respuesta normal del cuerpo, vital para la supervivencia. Nos permite reaccionar ante una situación de amenaza, generando cambios transitorios como aumento de la frecuencia cardíaca, dilatación de las pupilas y de los bronquios. Nos prepara para luchar o huir (“fight or flight”). La respuesta al stress está regulada por el Sistema Neuroendócrino, a través del eje hipotálamo-hipofisario-adrenal. Simplificando, la percepción de una amenaza estimula al hipotálamo (región del cerebro), que secreta la hormona CRH. La CRH estimula a la hipófisis (glándula pequeña que se encuentra debajo del hipotálamo), que responde secretando la hormona ACTH. La ACTH viaja por la sangre hasta llegar a las glándulas suprarrenales (o adrenales), que responden secretando cortisol, que media la respuesta del organismo al stress14. El cortisol, además, inhibe la secreción de CRH y de ACTH, mediante un mecanismo de retroalimentación negativa que limita el ciclo de respuesta al stress10,15.
El aumento de la secreción de cortisol por parte de las glándulas suprarrenales permite afrontar el stress y las exigencias del día -¡aumenta también al amanecer!16-, incrementando la disponibilidad de energía. Pero, si bien es necesario para sobrevivir, puede traer problemas para la salud. Hoy se vincula al stress a un aumento del riesgo de infartos, hipertensión, depresión, ansiedad, infecciones y enfermedades autoinmunes17.
Las células de la piel también son sensibles al stress y tienen un sistema equivalente al eje hipotálamo-hipofisario-adrenal10, que se estimula tanto por factores ambientales como emocionales14. Esta estimulación genera un aumento local de cortisol y otros mediadores del stress, que disparan una cascada de reacciones inflamatorias en la piel, responsables de los daños que mencionábamos más arriba.
Dicho todo esto, sobran las razones para entender por qué en la feria de innovación de activos cosméticos del año pasado nos interesamos por el Extracto de Tephrosia Purpurea. Su mecanismo de acción promete mucho: desde hace tiempo que las investigaciones científicas venían sugiriendo que el eje neuroendócrino de la piel era un buen objetivo terapéutico para mejorarla10,18. La Tephrosia Purpurea es una planta que crece en la India, que se utiliza con fines medicinales desde hace varios siglos. Lo que el extracto de sus semillas genera en la piel es una disminución de los niveles locales de cortisol, protegiéndola de sus efectos dañinos pro-inflamatorios. Además, aumenta la producción de un neuropéptido relajante y calmante para la piel (β-endorfina), y activa genes detoxificantes, antioxidantes y fortalecedores de la barrera. Su efecto protector nos podría haber llevado a formular un nuevo producto anti-stress, pero preferimos combinarlo con nuestra Vitamina C, logrando un Booster preventivo 2 en 1 (antioxidante y anti-stress) mega potente que esperamos que les guste tanto como a nosotras. ♥
Entendemos que no todos le dan tanta importancia a la piel como nosotras y que usar muchos productos puede ser engorroso (además, ¿quién tiene tanto tiempo?). Por eso sostenemos que la rutina básica debe ser: limpieza, exfoliación e hidratación. Pero, si querés llevarla a otro nivel (darle un “boost”), la aplicación de algunos activos de forma concentrada (como el Ácido Ascórbico de este Booster, el Retinol del Booster Retin-E, el Ácido Hialurónico del Booster Hyalu-G/P y el Acetil Octapéptido-3 del Booster Snap-8) es ideal. Es una manera de personalizar tu rutina, añadiéndole a los productos más generales algunos más específicos, según tus necesidades y lo que quieras combatir.
-“Primero que nada, no encontré un producto en Uruguay que me convenza 100% en cuanto a textura y a efectividad, así que lo desarrollé tal cual lo uso yo a diario: súper liviano, que no se acumule al aplicar otros productos, que no afecte la absorción de los activos de los cosméticos que aplicás a continuación, sin fragancia, sin alcohol y, por sobre todas las cosas: EFECTIVO.”- Flo
Además, existen muchas formas de Vitamina C. La que más nos gusta ya que tiene mayor solidez científica y efectividad -y con la que formulamos nuestro Booster- es el Ácido Ascórbico. Para que sea efectivo es necesario:
Que tenga una concentración de entre un 10 y un 20%. Si bien en The Chemist Look nos gusta jugar con las concentraciones altas, en este caso elegimos formularlo al 15%. El 20% puede ser un poco demasiado para algunas personas; 15% nos parece ideal. Que esté formulada en un pH ácido. El agregado de Ácido Ferúlico al 0,5% y de Alpha Tocoferol al 1% (Vitamina E), que potencian y estabilizan al Ácido Ascórbico. Que el envase tenga gotero y protección UV, para minimizar el contacto con el aire y así retrasar la oxidación. Además, el Booster Vit-C/FE integra a un novedoso ingrediente anti-stress que es 100% de origen vegetal, Ecocertificado orgánico: extracto de Tephrosia purpurea. Su avanzado mecanismo de acción (disminuyendo los niveles locales de la hormona del stress) hizo que el año pasado ganara el primer premio en una feria de innovación de ingredientes cosméticos.
El Booster VIT-C/FE es apto para todo tipo de pieles y todas las edades. Es ideal para quienes quieran empezar a cuidarse y prevenir daños causados por los rayos UV, la polución y el stress. Además, mejora manchas e ilumina: es uno de los preferidos de quienes buscan unificar el tono de la piel, sumar luminosidad y combatir el aspecto cansado.
Referencias